Ante la actual situación de emergencia climática, la Unión Europea se ha comprometido en el Acuerdo de Paris a reducir las emisiones globales de gases invernadero. España ha remitido a las Cortes el primer proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el primer proyecto legislativo para que España alcance la neutralidad de emisiones no más tarde de 2.050.
Los principales objetivos son:
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Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
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Aumento de energías renovables sobre el consumo total de energía.
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Mejora de la eficiencia energética.
Para abordar eficazmente un reto de esta dimensión las políticas de mitigación y adaptación al cambio climático se deben convertir en un objetivo socialmente compartido.
Aunque, de entrada, la obligación de aplicar nuevas medidas para cumplir los objetivos en materia de Cambio Climático pueda verse como una carga más, en realidad pueden ser muchos los beneficios asociados a las mismas para la empresa, en especial un notable ahorro de costes energéticos.
En este punto cabe destacar que la eficiencia energética es importante en dos sentidos: por un lado, la disminución de la huella de carbono, y por tanto del impacto de la actividad industrial, y por otro lado la disminución del consumo energético.
Se puede asumir, de forma generalizada, que los costes energéticos representan un 40% de los costes de operación de las depuradoras de agua industrial. Por lo que optimizar el rendimiento de las instalaciones mejorando la eficiencia energética (energía eléctrica) es un factor clave en el control de costes.
El objetivo es alcanzar la calidad del efluente reduciendo al máximo el consumo energético. Para ello es necesario optimizar el rendimiento de cada uno de los procesos. Esto requiere un conocimiento técnico de las instalaciones, ya que cada depuradora trabaja en unas condiciones determinadas y necesitará implementar unas mejoras específicas.
El mayor consumo energético se da en los sistemas de aireación de los tratamientos secundarios y es aquí donde hay diferentes factores a tener en cuenta a la hora de incidir en la eficiencia energética y por tanto en la reducción de costes: Reducción en origen:
Un punto importante que tener en cuenta es la caracterización de la entrada a la depuradora y la posibilidad de minimizar en origen, tanto caudal como carga contaminante. Es un factor que afecta directamente sobre los requisitos de aporte de oxigeno.
- Correcta operación de la depuradora:
En las depuradoras el mayor consumidor energético es el tratamiento biológico, por eso es vital su correcta operación. Se deben revisar los parámetros de explotación para verificar que se ajustan correctamente a las necesidades: carga orgánica del reactor, aporte de oxigeno, edad del fango o nivel de sólidos son algunas de las consignas a considerar. Una mala gestión puede generar un exceso de consumo energético innecesario y por tanto un exceso en el consumo eléctrico.
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Aplicación de tecnologías más eficientes en la aireación :
Hoy en día se dispone de tecnología de alta eficiencia muy desarrollada, tanto en equipos y maquinaria, como en automatización y control del proceso. La mejora de toda instalación supone una inversión económica inicial por lo que se debe realizar un estudio detallado para conocer el periodo de retorno de las mejoras y poder evaluar su implantación.
Es crucial escoger el sistema de aireación adecuado a cada proceso según las necesidades del sistema. La eficiencia energética de los sistemas de aireación empleados es muy diferente (medido en la relación capacidad de aireación / consumo energético). Así, por ejemplo, las turbinas superficiales son las menos eficientes y los sistemas de parrillas de difusores con soplantes externas los más eficientes. El buen dimensionamiento de las soplantes y el sistema de aireación, la instalación de variadores de frecuencia y, para grandes demandas, actualmente hay equipos de alta eficiencia, como los turbocompresores de levitación magnética que se están implantando con muy buenos resultados.
Son también de crucial importancia los sistemas de control inteligente para los procesos de aireación que regulan el aporte de oxigeno necesario con lo que se consigue minimizar el coste energético en el tratamiento biológico.
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Autoconsumo:
Uno de los factores en la eficiencia energética es la generación de energías renovables para autoconsumo dentro de los recintos de la depuradora.
Una opción muy importante especialmente en depuradoras grandes es la valorización de los fangos mediante la generación de energía a partir la producción de biogás.
Otra de las más implantadas es la energía solar mediante la instalación de paneles solares de alto rendimiento en los amplios espacios disponibles en las depuradoras debido a la rapidez y la sencillez de la instalación.
D&R tiene una amplia experiencia en la mejora de la eficiencia energética en depuradoras, mediante una operación eficiente e inteligente de sus instalaciones, acompañando a nuestros clientes en la reducción de costes y el cumplimiento de sus objetivos medioambientales. Esta experiencia, y los resultados obtenidos gracias a la misma, se ven respaldados por el proyecto en el que D&R colabora con la empresa AESA, mediante el cual se están realizando Estudios de Eficiencia energética en todas aquellas instalaciones gestionadas por la Agencia Catalana del Agua.
