La situación de competitividad existente en los mercados actuales hace que los diferentes sectores industriales se especialicen cada vez más es su actividad de producción principal, pero existen muchas actividades asociadas a la misma que necesitan de personal formado y especializado en la materia para llevar a cabo de forma óptima dichas funciones.
Este es el caso de las labores de logística, mantenimiento, consultoría (medioambiental, laboral, legal…) y, por supuesto, la depuración de los vertidos generados. En todos estos casos, existen dos vías para abordar esta cuestión: introducir en los equipos de las propias industrias personal formado en cada una de las materias, o contar con empresas externas especializadas que realicen dichas funciones.
En el caso de la depuración de aguas residuales, se pueden destacar varios aspectos que refuerzan y respaldan la opción de externalizar la operación de la misma a través de una empresa especializada en depuración de aguas residuales industriales. A continuación, se enumeran algunos de ellos:
- La industria se centra en su proceso productivo, concentrado sus esfuerzos de personal, control, mejoras y formación en aquellos aspectos que repercuten de forma directa en los resultados económicos de la empresa.
- El personal externo de la planta depuradora es especialista en la materia y está respaldado por un equipo con alta experiencia e importantes resultados que los avalan.
- El control de la estación de depuración es más exhaustivo, ya que no se comparten otras tareas dentro de la fábrica.
- Gracias a la experiencia y conocimientos de los operadores externos, y del equipo técnico que hay detrás, es posible adelantarse a posibles problemas, tomando las medidas necesarias para evitar la aparición de los mismos.
- La industria evita problemas de gestión de personal, como por ejemplo sustituciones de vacaciones, bajas o reemplazo del operador, entre otros, lo que supondría contar dentro de la plantilla con varias personas con formación específica.
- Reducción del consumo de reactivos gracias a un control y ajuste continuado de la planta según las necesidades de cada momento.
- Reducción del consumo energético gracias a la optimización del proceso.
- Optimización en la gestión de fangos (reducción de humedad del mismo, ajustes continuados de las purgas necesarias según necesidades de la planta…)
- Evitar averías que suponen elevados costes de reparación/sustitución, gracias a un correcto mantenimiento de los equipos.
- Se garantiza un vertido estable, pudiendo llegar a reducir la tasa o canon de vertido, ya que el personal de operación es experto en la materia.
D&R presta servicios de explotación de depuradoras de aguas residuales industriales desde hace más de 30 años, pudiendo adaptar este servicio a las necesidades y posibilidades de nuestros clientes y con diferentes niveles de colaboración: desde una operación del proceso de depuración con personal propio, hasta un convenio de colaboración en el que se incluyan todos los costes asociados a la misma (personal, mantenimiento, reactivos, gestión de fangos, sustitución/reparación de equipos, consumos eléctricos….). Si quieres conocer este u otros servicios, y de qué forma podemos ayudarte a gestionar de forma óptima tu EDARI, puedes ponerte en contacto con nosotros, sin ningún tipo de compromiso.